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21.1.09

ME VOY DE PESCA


Confirmado el ingreso me atrevo ya a deciros que me operan el Viernes. Espero que la medusa esté preparada porque no sabe el hábitat que se le espera. Necesitaré llevarme bien con ella y no presentar rechazo, de lo contrario el asunto se podría complicar y habría que pensar en una reconstrucción con mis propios tejidos, algo que en un principio se descartó debido a mi delgadez. Estoy ansiosa por pasar de una vez por esto, llevo tiempo esperando y preparándome para ir en las mejores condiciones a quirófano a pesar del dolor de hombro que todavía tengo, pero que esperamos que mejorará al sustituir el expansor que está tirando de la fascia, ralentizando la movilidad e impidiendo la recuperación total.
Este viaje no me huele a Hospital, el I.V.O es otro mundo, es mi segunda casa, las enfermeras son adorables, los médicos muy competentes, me faltan palabras para agradecer. La comida es muy buena también. Me he llenado el ipod de música para cuando esté sola, con unos auriculares que me trajeron los Reyes que son la bomba. El otro día iba yo andando con la música puesta y debió ser que iría cantando porque se me quedaron riendo dos tipos, que no estaban nada mal, me gustan los melenudos ayyyyyssss, y atrevida les sonreí. Cómo cambia la vida cuando vas con los auriculares puestos, la música es la única droga que he conocido, me lleva lejos, me pone los pelos de punta, me hace llorar. Incluso, he comprado algunas pelis para ver en el portátil. Lo que ya no se es si habrá conexión a internet, veremos.
Tan solo me queda hacer la maleta, qué fuerte!!!, lo mío es muy grave, la otra vez me llevé tantas cosas que parecía que me iba de viaje de placer. Pasó una mañana el cirujano para ver cómo estaba y me pilló con una mascarilla puesta, qué vergüenza!!!, es mi fidelidad a las cremitas.
Que nadie piense que estoy frivolizando, no puedo ser más franca, quizás no sea consciente de la lotería que me ha tocado pero nunca jamás he pensado que voy a morir de esto. He hecho del cáncer una forma de vida, simplemente tengo unos límites físicos en este momento pero con la esperanza de que los cirujanos jugarán bien con la plastilina y me la dejarán lo suficientemente bien colocada para que cada día cuando me levante y me mire al espejo no me cague en algo negro, simplemente tengo que tomar una pastilla antitumoral que aunque la he dejado por 15 días y me encuentro fenomenal, por narices la tendré que seguir tomando y es un quimio diaria, lenta, que te deja las articulaciones polvo (solución, hacer deporte, mucho deporte), simplemente me tengo que hacer más revisiones que otra persona.
Y con esa maleta habrá un problema, al meteros a todas dentro se va a romper la cremallera pero sea como sea os llevo conmigo porque sois el combustible que me hace correr a la velocidad que corro, para ganar esta carrera en la que me ha tocado participar.
Solo le pido a las estrellas volver pronto para seguir ofreciendoos mis asilvestradas recetas (me encanta la palabra, es un regalo de una buena amiga), mis provocaciones, mi tiempo y el cariño con el que siempre he intentado navegar.
Portaos bien. Hasta pronto.
Imagen de David Jay.

20.1.09

FABADA VEGETARIANA


Hoy la puesta en escena está inspirada en el blog de El delantal verde. Allí vi unas patatas castellanas que prometían riquísimas, imaginaba que el caldito que iban a hacer así sin más no tendría desperdicio. El caso es que cuando las tuve ya hechas, las veía tan solitarias que entre duda y duda decidí buscarles compañía y les añadí un bote de habichuelas transformando la receta en una supuesta fabada, que por no llevar nada de chicha la he decidido llamar "vegetariana".
Os copio pues la receta de las patatas riojanas de Elena y si queréis al final, añadis un bote de habichuelas para dar compañía a las solitarias patatitas.


Ingredientes

1 Kg de patatas
1 cebolla
1 diente de ajo
1 cucharada de harina
1 cucharada de pimentón dulce (puse pimentón picante de La Vera)
2 hojas de laurel
agua o caldo vegetal
sal
aceite de oliva
pimienta negra molida
un bote de habichuelas orgánicas

Elaboración

Calienta en una cazuela el aceite y saltea en él la cebolla y el ajo picado (me gusta cargadito de ajo).
Cuando esté doradito añade las patatas cortadas en trozos gruesos y saltea.
Añade el pimentón y rehoga unos minutos.
Espolvorea la harina y haz que se dore ligeramente.
Vierte el agua o caldo cubriendo todo y añade la sal, el laurel y la pimienta negra molida.
Cuece hasta que las patatas estén tiernas y entonces añade el bote de habichuelas removiendo hasta que mezcle.

Esta receta calentita, calentita se la dedico a Soledad Pérez para que se anime en esta misión anticangrejo que ambas compartimos.

Salud!!!!